El Partido Popular de Extremadura ha lanzado duras críticas contra el PSOE tras su voto en contra de una propuesta para mantener abierta la central nuclear de Almaraz. José Ángel Sánchez Juliá, portavoz del PP extremeño, calificó la decisión como una “penúltima traición” de los socialistas a la comunidad autónoma, acusándolos de poner en riesgo el futuro de miles de familias y la principal industria de la región.
Sánchez Juliá no solo lamentó el voto negativo del PSOE, sino que también criticó la actitud de Miguel Ángel Gallardo, secretario de los socialistas extremeños, por justificar dicha postura. Según el portavoz popular, Gallardo se encuentra “plegado” a los “intereses” de Pedro Sánchez, cediendo ante las directrices de Ferraz, que supuestamente busca el cierre de la central nuclear.
“Es una nueva traición que además viene acompañada de la complicidad de Miguel Ángel Gallardo, que ha justificado ese voto en contra”, aseveró Sánchez Juliá. El portavoz también denunció que los diputados extremeños del PSOE “han celebrado este portazo a la continuidad de Almaraz con risas y aplausos”, preguntándose “¿Qué les hace gracia? ¿De qué se ríen?”.
El PP argumenta que el cierre de la central nuclear tendría un impacto devastador en la economía local, afectando a unas 4.000 familias que dependen directamente de su actividad. Sánchez Juliá enfatizó que “se están riendo del futuro de 4.000 familias que viven de la Central Nuclear de Almaraz. Se están riendo del futuro de Extremadura. Se están riendo de la continuidad de la mayor industria que tiene nuestra región. Y no es un asunto para reírse”.
Defensa de la continuidad de almaraz
Frente a la postura del PSOE, el PP se presenta como el único defensor de la continuidad de la central nuclear. Sánchez Juliá destacó el papel de la presidenta María Guardiola en la defensa de Almaraz, afirmando que “la única que está defendiendo la continuidad de la Central Nuclear de Almaraz es la presidenta María Guardiola. Y frente a ello hay la nada”.
El portavoz popular concluyó reafirmando el compromiso de su partido con la lucha por el futuro de la central: “Nosotros vamos a seguir luchando por la continuidad. Vamos a seguir reivindicando que nuestra central no se puede cerrar”, sentenció.
La controversia en torno al futuro de la central nuclear de Almaraz ha escalado a nivel político, generando un intenso debate sobre la política energética y el desarrollo económico de Extremadura. Mientras el PP aboga por extender la vida útil de la central, argumentando su importancia para el empleo y la economía regional, el PSOE defiende una transición hacia fuentes de energía renovables, priorizando la sostenibilidad a largo plazo.
El cierre de la central nuclear de Almaraz, previsto en el calendario de cierre gradual de las centrales nucleares en España, ha sido objeto de debate y controversia desde hace años. La decisión final sobre su futuro tendrá un impacto significativo en la región y en el panorama energético nacional.